El panorama político español no apunta bien si nos atenemos al resultado de las encuestas. Ello podía no preocuparnos; no deja de ser un problema de los partidos y sobre todas las cosas de aquellos de los que depende su puesto de trabajo.
A mí me preocupa pues a esta época de ruido permanente le va a suceder una de inestabilidad. Las elecciones municipales y autonómicas pueden ser unas verdaderas primarias de las generales que vienen poco tiempo después.
La inestabilidad política si que puede ser un grave problema para los españoles.
Empecemos por la derecha. El PP sin VOX no es una alternativa de gobierno. La extrema derecha parece, siempre según las encuestas, va a conservar un porcentaje de votos que obligará a los conservadores a buscar una alianza. Feijoo con sus torpes intervenciones, que encima no son graciosas como las de Rajoy, provoca una permanente subida del pan. Si sus asesores no espabilan al candidato, al final podemos llegar a no saber de lo que habla. La metedura de pata con lo que dijo, quiso decir y se le entendió con los Tiranos Banderas americanos es sencillamente grotesco. No es un candidato con capacidad de corregir la deriva del populismo a su derecha. Feijoo perdió una oportunidad de oro de marcar su territorio durante la chancra moción de censura. La inestabilidad le va a venir de perlas a los Abascalos.
Ciudadanos es ya parte de la historia política española. Eso tiene un responsable por ambición y tontería que se llama Albert Rivera. No hay que olvidarlo.
La izquierda vuelve a ser las izquierdas y hasta el final no sabremos, ¡si lo sabemos!, cuantas son y que pretenden. La Glamurosa meiga galega, sobre la que hay que recordar el desastroso resultado obtenido en su tierra en los comicios que se han ido celebrando allí, no va a captar muchos votos del centro izquierda por muchos trajes de diseño y su pelo bella cabellera que exhiba. Además, no debe de olvidar que “el lobo feroz” convertido en el agitador mediático del podemismo no va a dudar ni un momento en tirarse a su cuello. Es el papel de Iglesias, siempre lo ha sido y además le puede. Le puede eso como considerar que él y no otro es el único que puede ser protagonista del cambio histórico en España.
Los socialistas empiezan a ver que su tiempo se termina y por ello ese denudado afán de ocupar lugares de atalaya para así poder tener una salida más honrosa
Lo de Podemos no deja de ser un Gran Alianza, personal, por llegar a ser y conservar lo que nunca nadie había creído que podían llegar a ser. Muchos de los votantes tradicionales de la izquierda esta esquilmados de esa imagen de broncas de bar de facultad. Además, la tal PAM, que no sé de dónde viene (el nombre), entre videos y declaraciones hacen huir a los electores, por no decir las dirigentas del gobierno. Eso si, ninguno de ellos van hacer nada para romper la coalición hasta el último día. Al día siguiente, la noche de los cuchillos largos se va a quedar corta.
Los socialistas empiezan a ver que su tiempo se termina y por ello ese denudado afán de ocupar lugares de atalaya para así poder tener una salida más honrosa al volver al mercado laboral a buscar trabajo. Pasar de diputado a vendedor de pisos no es plan.
Luego están los numantinos, los que van a refugiarse en las instituciones, negaran que ellos tuvieron que ver con lo anterior. Recordaran, como ya han hecho, que el resultado es histórico e intentaran hacerse fuertes en los inescrutables vericuetos internos del partido para ser ellos los que controlen también el proceso sucesorio. El miedo existente actualmente entre los socialistas es directamente proporcional, el que tienen los militantes, viejos y nuevos, y el que les corre por la espalda hasta llegar a la curcusilla a los situados y bien situados de perder sus gabelas públicas.
Estas son las razones. Los hechos son, que si volvemos a tener un parlamento divido en bloques y lo que es más grave una cámara en manos de un bloque y la otra en manos de otros imaginemos el panorama. “No es no”, “si es si” y movemos el rey y la torre para seguir la partida.
El único que se está asegurando su futuro de verdad es el que está buscando trabajo fuera de España.