El Gobierno de Ucrania ha advertido este jueves de la situación de la central nuclear de Chernóbil, desconectada de la red eléctrica y tomada por las tropas rusas, es "muy peligrosa". El asesor de la Presidencia ucraniana ha advertido que un gran riesgo para Europa y para la propia Rusia. "Debido a las acciones de los ocupantes, el suministro estable de energía a las instalaciones ha sido suspendido, si bien no puede quedarse sin electricidad", ha declarado Mijailo Podoliak.
El político ucraniano ha destacado que Rusia comenzó una guerra de conquista similar a las de la Edad Media y ha apuntado que, en este contexto, no hay lugar para las estructuras modernas. "Estos lugares no están claros para ellos y pueden ser usados como cosas para un chantaje", ha subrayado.
La situación de la planta nuclear no es medible, puesto que no se están transmitiendo datos al Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) y no se tiene certeza de lo que está pasando dentro. Pide a la comunidad internacional un esfuerzo mayor y más presión para "expulsar de Ucrania" a los invasores.
Las palabras del asesor del presidente se sitúan un día después de que la empresa energética ucraniana Ukrenergo confirmara que la central había quedado "totalmente desconectada" de la red eléctrica por las "acciones militares de los ocupantes rusos".
Tras ello, el ministro de Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, pidió a la comunidad internacional "que reclame inmediatamente a Rusia un alto el fuego y permita a las unidades de reparación restaurar el suministro eléctrico", cuyos generadores de diésel tienen 48 horas de energía de reserva para abastecer a la central.
El organismo energético apunta que se está vulnerando "un pilar clave de seguridad para garantizar el suministro ininterrumpido de electricidad", aunque no ve un impacto “crítico” sobre la seguridad. “La carga caliente del combustible gastado almacenado en la piscina y el volumen de agua para enfriamiento en la central nuclear de Chernóbil es suficiente para la retirada de calor sin la necesidad de suministro eléctrico", prosiguen los responsables del OIEA.
La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zajarova, divide la responsabilidad de la situación entre las “tropas rusas, especialistas ucranianos, el personal civil de la planta y la Guardia Nacional de ese país", según indica la agencia de noticias rusa TASS.