Así lo ha hecho público la Casa Real, que a través de un comunicado ha dado a conocer la misiva que el ex monarca ha enviado a su hijo, el Rey Felipe VI. Aunque el emérito asegura no tener intención de volver de forma inmediata a España, se reserva la posibilidad de retornar en un futuro.
Juan Carlos I se trasladó a Emiratos árabes Unidos en agosto de 2020, en pleno escándalo por la apertura de diligencias por parte de la Fiscalía, sobre supuestos cobros de comisiones por la adjudicación del AVE a la Meca, así como por su relación con la Fundaciones Lucum y Zagatka, y el presunto uso de tarjetas ‘black’ financiadas por el empresario mexicano Allen Sanginés-Krause a través de un testaferro. Finalmente, la Fiscalía ha archivado todas las causas abiertas contra el emérito.
Apenas tres días más tarde de que el ministerio público tomara la decisión de dar ‘carpetazo’ a todas las investigaciones en curso, Don Juan Carlos habría trasladado la carta a su hijo, que la Casa Real ha hecho pública a petición del ex monarca.
En la misiva a su hijo, el ex Jefe del Estado asegura que la decisión de abandonar España la tomo “guiado por el convencimiento de prestar el mejor servicio a España y a todos los españoles, a sus instituciones y a ti como Rey”, afirma. Sobre los “acontecimientos pasados de mi vida privada”, que le llevaron a ser investigado por la FGE, asegura lamentarse “sinceramente”. En necesario recordar que, aunque el ministerio Fiscal archivó la pasada semana todas causas abiertas del antiguo monarca, no significa que no llevara a cabo ningún delito, si no que los cometidos estarían libres de responsabilidad penal, al haberlos cometido durante su estancia en la Jefatura del Estado, es decir siendo inviolable.
Hasta la semana pasada, Don Juan Carlos estaba siendo investigado por ser beneficiario de una tarjeta 'black' financiada por un empresario mexicano, cobrar comisiones ilegales por la construcción del AVE a la Meca y por tener presuntamente 10 millones de euros en un paraíso fiscal.
“Se han identificado cuotas defraudadas a la Hacienda Pública en el IRPF de los ejercicios 2008 a 2012 que superan con creces el importe de 120.000 euros que el artículo 305 del Código Penal establece como umbral del delito”, aseguró en su informe la Fiscalía, que añadía “La posible responsabilidad penal de los ejercicios 2008 a 2011 estaría extinguida por la prescripción del delito. No así la correspondiente al ejercicio de 2012 que, no obstante, tampoco sería susceptible de reproche penal toda vez que en aquella fecha y hasta el 19 de junio de 2014 Juan Carlos de Borbón estaba protegido por la inviolabilidad que el artículo 56.3 de la Constitución española reconoce al jefe del Estado”.
Don Juan Carlos continuará residiendo en Abu Dabi, donde asegura haber “encontrado tranquilidad, especialmente para este período de mi vida”, asegura. En la carta también afirma que realizará visitas a España “con frecuencia”, “para visitar a la familia y amigos”.
Pese a todo, el emérito deja entreabierta la puerta para regresar de forma permanente a España en el futuro, al asegurar que “tanto en mis visitas como si en el futuro volviera a residir en España, es mi propósito organizar mi vida personal y mi lugar de residencia en ámbitos de carácter privado para continuar disfrutando de la mayor privacidad posible”.
Se podría entender que, en caso de retornar, se alojaría en una residencia privada y no en el Palacio de la Zarzuela, que es la opción que se habría especulado en los últimos meses. Esta supuesta opción facilitaría la complicada situación del Rey Felipe VI que ha estado tratando de poner ‘tierra por medio’ con su padre durante los últimos dos años, desde que en marzo de 2020 renunció a la herencia de su padre tras salir a la luz su relación con la Fundación Lucum y la Fundación Zagatka.