Al formar parte de la OTAN, España tiene desplegadas un gran número de tropas en bases militares de países de Europa del Este. Además de los soldados, desde hace varios años el despliegue cuenta con grupos blindados, cazas y buques.
Desde 2017, la base de Adazi en Letonia, cuenta con la presencia de un grupo de 350 militares españoles junto a seis carros de combate Leopardo y quince blindados Pizarro. Estos soldados, al igual que el resto de efectivos desplegados en las cercanías de la frontera rusa en otras ubicaciones de Europa, tratan de disuadir a la potencia internacional de anexionar territorio tal como hizo en 2014 con la Península de Crimea y, como todo parece apuntar, está haciendo en la actualidad con el resto de Ucrania.
La base letona está situada a 120 kilómetros de la frontera, lo cual haría las veces de 'interruptor' de un conflicto internacional si Rusia decidiera avanzar sobre el país europeo. Al causar bajas en soldados de diversas nacionalidades, indirectamente la potencia estaría declarando la guerra a los países OTAN.
España cuenta con cuatro cazas eurofighter, seis carros de combate Leopardo, quince blindados Pizarro y tres barcos en zonas limítrofes con Rusia para ejercer una función "disuasoria"
Desde hace menos tiempo, desde el 11 de febrero, la base de Graf Ignatievo, en Bulgaria, cuenta con la presencia de cuatro cazas Eurofighter y 130 militares españoles. Su misión es defender colaborar en la defensa del espacio aéreo búlgaro, incluido el del Mar Negro, donde con frecuencia aviones rusos de combate vuelan sin autorización ni identificación. Su misión tiene como fin el próximo 31 de marzo, cuando los cazas serán enviados a Lituania para realizar los mismos ejercicios de patrullaje, allí se les sumaran otros dos aviones españoles.
De hecho, la propia ministra de Defensa española, Margarita Robles, acudió el pasado lunes a la base militar búlgara, donde aseguró que la labor desempeñada por el ejército español no son acciones “ofensivas”, si no tan solo de disuasión. La propia ministra vivió una alerta por la detección de aeronaves sin identificar.
Además de la presencia aérea y terrestre, la Armada cuenta con presencia marítima en el Mediterráneo, dentro de agrupaciones de la OTAN para el Mediterráneo y el Mar Negro. Desde el 22 de junio de 2021, el Buque de Acción Marítima de origen español ‘Meteoro’ ejerce el mando del grupo naval SNMCMG-2. Dentro de esta flota, se encuentra el cazaminas hispano ‘Sella’. A estas dos naves hay que sumar la fragata Blas de Lezo y que se incorporó a la flota SNMG-2.