Países Bajos atravesará un confinamiento estricto hasta el próximo 14 de enero. Así lo ha anunciado el primer ministro, Mark Rutte, como estrategia para frenar el impacto de la nueva variante del coronavirus ómicron. Todos los servicios no esenciales se mantendrán cerrados y se decretan nuevas limitaciones a las reuniones sociales. La medida va acompañada de un intento del Ministerio de Sanidad por acelerar la campaña de vacunación, con la intención de que todos los adultos hayan recibido la dosis de refuerzo durante las primeras semanas de enero.
Desde este domingo, Países Bajos vuelve a entrar en un confinamiento estricto ante la oleada de casos en Europa y la amenaza de la nueva variante ómicron. El primer ministro holandés, Mark Rutte, anunció este sábado la medida, que se extenderá hasta al menos el 14 de enero.
El cierre afecta a todos los sectores salvo a los comercios esenciales, como supermercados y farmacias, que podrán abrir hasta las ocho de la tarde. Los locales de hostelería, actividades culturales y de ocio y gimnasios permanecerán cerrados. Los eventos deportivos continuarán sin público. Los institutos, universidades y otras instituciones académicas se suman a los colegios, que ya cesaron su actividad el pasado viernes.
Además, se limita a dos el número de personas no convivientes que pueden reunirse fuera del hogar y solo se podrán recibir visitas de un máximo de dos personas en las casas. Durante los días de Nochebuena y Navidad la limitación se amplía hasta cuatro visitantes, pero no habrá excepción en fin de año.
El encargado de explicar la "difícil decisión" ha sido Jaap Van Dissel, jefe del departamento de enfermedades infecciosas del Instituto para la Salud y el Entorno (RIVM) y del equipo científico que asesora al Gobierno. "Esperamos que la variante ómicron sea dominante entre Navidad y Año Nuevo y sabemos que no estamos tan bien protegidos contra ella como con la delta" ha explicado en la rueda de prensa junto a Rutte.
Por su parte, el primer ministro ha informado de que el confinamiento intenta evitar un posible colapso sanitario y dar tiempo a Ministerio de Sanidad para que avance en la administración de la dosis de refuerzo de la vacuna.
"Esperamos que la variante ómicron sea dominante entre Navidad y Año Nuevo y sabemos que no estamos tan bien protegidos contra ella como con la delta"
Las autoridades sanitarias han anunciado que todos los adultos del país podrán pedir cita para recibir esta dosis extra contra la Covid antes del 7 de enero. Según el diario NL Times, el país pretendía administrar la nueva dosis a los mayores de 60 años durante las últimas semanas de 2021 y comenzar a administrarla a los menores de 60 a principios de 2022. Ahora el Ministerio de Sanidad insta a los ciudadanos a programar su cita lo antes posible para aumentar el grado de protección frente a la nueva cepa.
“Debemos terminar con esta ofensiva de refuerzo en la segunda quincena de enero. Para entonces, todos habrán tenido la oportunidad de recibir un refuerzo” ha dicho el ministro de Salud, Hugo de Jonge.
Según el RIVM todavía hay 1,3 millones de personas sin vacunar y la campaña para la tercera dosis ha empezado más tarde que en otros países vecinos. El ministro espera que alcancen los 8,5 millones de personas con dosis de refuerzo a mediados de enero.