En Reino Unido comienzan a experimentar cambios en la libertad de acciones dentro del país, permitiendo el ocio nocturno sin aforo ni mascarilla, a pesar del repunte de contagios. No obstante, en lo que respecta a los viajes fuera del país, aumenta las restricciones, exigiendo cuarentena a aquellas personas que vayan a países "ámbar" -como España- y no tengan la pauta de vacunación completa.
La evolución de las restricciones en Reino Unido a causa del Covid-19 ha variado bastante en los últimos días. Para muchos empresarios enfocados en el ocio nocturno, la pandemia ha sido una tragedia, llegando a perder 40.000 libras al mes, y tras 16 meses en esta situación, este lunes 19 de julio a las 00:01, miles de británicos han tenido la oportunidad de ir a discotecas y clubes nocturnos, bautizando la fecha como "Freedom Day" o el "Dia de la Libertad", sin distancia social, ni aforo, ni mascarilla... la cual ha dejado de ser obligatoria en interiores y transporte público.
Este fin de las restricciones en Reino Unido, ha provocado un repunte de contagios, registrando 48.161 nuevos casos y 25 muertos en las últimas 24 horas. A pesar de las decisiones del Gobierno Británico sobre el fin de las limitaciones, el primer ministro británico, Boris Johnson, ha pedido cautela y ha confirmando que vuelven las cuarentenas para aquellas personas que procedan de un país en lista roja y para los que no cuenten con pauta completa de vacunación procedentes de un país en la lista ámbar.
Sobre esto, España se encuentra como uno de los países que está dentro de la lista ámbar británica, lo que quiere decir, que aquellas personas que cuenten con su vacunación completa podrán volver del país sin la necesidad de guardar cuarentena, sin embargo, si tendrán que realizarse dos pruebas de detección del Covid-19, antes y después del viaje.
Por ello, la vacunación de los habitantes de Reino Unido es esencial para España, siendo uno el principal emisor de turistas. Según las cifras publicadas por el INE, entre enero y mayo del 2021, llegaron a España 130.000 turistas británicos, en comparación con 2019, cuando se registraron 6,25 millones.
Las Islas Baleares han sido una de las más afectadas en este sentido, ya que hasta el pasado 14 de julio se encontraban dentro del semáforo verde británico y ahora se encuentran, como el resto del país, en ámbar. No obstante, Iago Negueruela, portavoz del Gobierno balear y consejero de Turismo, afirma que "no hay perjuicio", ya que los viajeros con pauta completa y menores de 18 años son un tipo de turismo que interesa a las islas.
Por su parte, el portavoz de la asociación de Agentes de Viajes británicos (ABTA) se ha posicionado afirmando que el meter a las Islas Baleares en la lista ámbar es "un paso atrás para la industria de los viajes" y que estas restricciones "retrasarán cualquier recuperación significativa para la industria". Es por ello, que ha pedido al Gobierno británico ser más "transparente" en la toma de decisiones para mover países entre las listas verde ámbar y roja.