Según el estudio del CIS para mayo, el PSOE aguanta bien el desgaste, que ha sucedido en todos los gobiernos europeos, por estar gestionando la difícil pandemia, e incluso subiría en tres escaños con respecto a las últimas elecciones. El barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas recoge también los efectos de las recientes elecciones en Madrid este 4M. Que son mucho menores de lo que le gustaría a Casado. Por su parte el PP, también avanza, especialmente favorecido por el desplome de Ciudadanos. Tras la gestión de la pandemia, todos los gobiernos europeos han sufrido cierto desgaste, sin embargo, comparativamente, el Ejecutivo socialista español, es el que mejor resiste. A pesar de las prisas del PP por alcanzar la Moncloa, todavía están lejos y lo que es peor para ellos, aún quedan por delante dos años de legislatura que vendrán definidos por la administración de los 140.000 millones de los Fondos Europeos, conseguidos por Sánchez, para la Recuperación Económica y la Transformación de España.
El Centro de Investigaciones Sociológicas ha publicado su barómetro de mayo en el que ha ofrecido su habitual estimación de voto. El Partido Socialista Obrero Español de Pedro Sánchez sería nuevamente la formación política más votada si se celebrasen hoy elecciones. Se haría con el 27,9% del voto emitido, lo que supondría repetir el resultado de noviembre del 2019 que le permitió llegar hasta la Moncloa junto a su socio de Gobierno, Unidas Podemos. Incluso, en la traducción de los porcentajes en escaños, el PSOE subiría tres escaños con respecto a las últimas elecciones. Lo que acallaría la falsa euforia del PP por haber ganado las elecciones madrileñas del 4M. Especialmente, teniendo en cuenta, que los de Casado, se desplomaron y se quedaron apenas apenas, sin representación tanto en Cataluña como Euskadi,
El Partido Popular mejoraría por primera vez en muchos meses su nefasto resultado de las últimas elecciones generales y se sitúa a 4,5 puntos del PSOE, con el 23,4% de estimación de voto. Su mejora se debe al desplome de Ciudadanos que ya es tendencia en todo el país, por su errática política de apoyo incondicional al PP, lo que le ha hecho ser percibido no como un partido liberal de centro, sino como un apéndice del propio PP. Según estos resultados, no parece ni mucho menos un premio a su labor de oposición. Es la clara absorción de los populares del voto de Ciudadanos. El pasado 4 de mayo, la formación de Inés Arrimadas se convirtió en fuerza extraparlamentaria en la Asamblea de Madrid y ni siquiera Edmundo Bal pudo salvar los muebles de los liberales. Pasaron así de ser socios de Gobierno a quedarse en una situación muy delicada en la región.
Lo sucedido en Madrid podría pasar ya en otras regiones donde peligra también el futuro de Ciudadanos. Por calendario, y si no salta ninguna sorpresa, la siguiente cita electoral se producirá en Andalucía donde Ciudadanos forma parte del Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla. Y habrá que esperar a ver si la formación 'naranja' consigue parar la sangría de votos hacia el Partido Popular.
Según el CIS, los populares también estarían recuperando votos de la extrema derecha de Vox que parece sufrir una tendencia a la baja. Aunque los de Abascal consiguen retener a buena parte de su electorado y no parece fácil que el PP pueda arañar más de su base electoral. Si se confirman estas variantes, la tendencia parece ser el refuerzo del bipartidismo, con el Psoe como partido hegemónico.
Santiago Abascal y su partido, Vox, siguen siendo la tercera fuerza política, con el 13,7% del voto en la estimación del CIS. En las últimas elecciones consiguieron el 15,1% del voto lo que les otorgó los 52 diputados que en la actualidad tiene en el Congreso. En la Comunidad de Madrid, hace dos semanas, consiguió mantener el apoyo en las urnas sin que la líder del PP, Isabel Díaz Ayuso, consiguiera robarles voto. Por tanto, será una tarea aún más difícil para Pablo Casado, un líder político con mucho menos tirón electoral que su compañera de Madrid.
El otro partido del gobierno, Unidas Podemos, se encuentra en una situación de cierta interinidad tras la salida de Pablo Iglesias del Ejecutivo y de la política activa tras los malos resultados de la Comunidad de Madrid. Ahora, Yolanda Díaz es la cara visible de los 'morados' en el Consejo de Ministros y hay que esperar unas semanas para ver qué efectos tiene a nivel electoral el cambio. La vicepresidenta gallega no genera tanto rechazo en parte del electorado y no movilizará el voto de otros partidos, pero está por ver si es capaz de ilusionar a su electorado. De momento, UP se mantiene en cuarta posición, según el CIS, con el 10,4% del voto. Cabe recordar que en marzo de este mismo año, el partido se situaba por debajo del 10% de apoyo electoral prácticamente empatado con Ciudadanos. Y ahora recupera parte del terreno para acercarse poco a poco al 12,8% que cosechó en los últimos comicios generales.
La sangría de Ciudadanos parece imparable. Los de Arrimadas tendrían hoy el 5,3% del voto emitido, por debajo incluso del 6,7% que le dio los actuales 10 diputados que conserva en el Congreso. Todo parece ponerse en contra del partido que vino para intentar ser juez entre la derecha y la izquierda para ocupar el centro político de nuestro país. Pero sus estrategias equivocadas le abocan a una situación complicada. Que empeora con la fuga de concejales y diputados, sobre todo al Partido Popular que les mantiene las puertas abiertas para hacerse con sus votos.
El panorama político español sigue completamente fragmentado. Si hasta ahora había cinco partidos con posibilidades de acceder al Gobierno gracias a su alto número de diputados. Ahora parece que vamos encaminados a una lucha a dos bandos con dos partidos en cada uno de los lados.
Así, el PSOE y Unidas Podemos están obligados a entenderse aún mejor y a trabajar para ampliar su base electoral y el número de diputados y diputadas que puedan conseguir entre ambos. Ahora la suma de sus porcentajes de voto se sitúa en el 38,3% (27,9 el PSOE y 10,4 Unidas Podemos). La gestión de la pandemia y la crisis económica les pasa factura ya que en noviembre del 2019 acapararon el 40,8% del voto, lo que les valió para conformar el actual Gobierno de coalición. Bien harían ambas formaciones en centrarse en el acuerdo de gobierno, e incluso en actualizarlo para no someterse a más tensiones. Precisamente este martes se producirá un nuevo momento de tensión a cuenta de la admisión a trámite de la Ley Trans en la que ambos partidos mantienen algunas diferencias.
Por su parte, Partido Popular y la ultraderecha de Vox son la alternativa al actual Ejecutivo. Pablo Casado sabe que no llegará en solitario a la Moncloa y necesitaría obligatoriamente a Vox a su lado. Por tanto, si Casado quiere gobernar España tendrá que contar con Santiago Abascal en un hipotético Ejecutivo, quien sabe si como vicepresidente primero. El programa conservador de los populares se mezclaría con el ultraconservador y en algunos puntos claramente racista e incluso fascista de Vox. Esa es la alternativa.
En cuanto al número de diputados que tendría cada formación, la web especializada Electomania ha hecho su propia predicción. Así el PSOE tendría 123 diputados, tres más que los que tiene actualmente; El Partido Popular superaría el centenar y quedaría con 101 asientos; Vox bajaría de los 52 actuales a los 43; Unidas Podemos alcanzaría 28 escaños; y Ciudadanos quedaría con 8. Como novedad, el partido de Íñigo Errejón, pisaría los talones a los naranjas con 7 parlamentarios, en una subida que también hay que tener en cuenta.
La suma de ambos bloques aún sitúa a la izquierda por delante de la derecha. El PSOE y Unidas Podemos tendrían 151 diputados, cuatro menos que en la actualidad; mientras que PP y Vox sumarían 144, tres más que en la actualidad.
La elección del nuevo gobierno, con estos números, dependería también de la habilidad de uno de los dos bandos de trazar alianzas con otras formaciones como nacionalistas vascos, catalanes y otras fuerzas minoritarias. Ahí tiene las de ganar la izquierda ya que un futuro gobierno PP+Vox tendría imposible ganarse la confianza del resto de la cámara.