El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud tomará este miércoles una decisión definitiva de cara a las restricciones en Semana Santa. Ante ello, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha puesto sobre la mesa este martes una última propuesta que extiende al puente de San José el cierre perimetral y las medidas planteadas en el plan para Semana Santa a aquellas regiones donde el día 19 de marzo sea festivo. Así lo recoge el borrador que el Ministerio de Sanidad presentará este miércoles para debatir con las autonomías, unas medidas que no afectarán ni a Canarias ni a Baleares, según se indica en el texto.
La disconformidad de la Comunidad de Madrid a este acuerdo sigue siendo palpable, reafirmando su posición a cerrar y reiterando que esta medida solo debe concebirse como “la última opción a tomar después de intentarlo todo”.
Tras los datos devastadores que ha dejado la tercera ola del coronavirus en España, y dado alguna tendencia a la baja, las CCAA han iniciado una desescalada prudente en sus territorios, con una incidencia acumulada cada vez más ligera, situada en los 139 casos por cada 100.000 habitantes, y con un avance en la vacunación cada vez más notable.
Ante esta mejoría, el debate entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas se encuentra ahora en las estrategias a seguir de cara a Semana Santa para evitar que vuelva a ocurrir lo que sucedió en las vacaciones de Navidad, cuando se optó por relajar algunas medidas y la incidencia acumulada, los ingresos y los muertos por coronavirus se dispararon.
En este sentido, el Ministerio de Sanidad, dirigido por Carolina Darias, ha propuesto este martes a las comunidades autónomas cerrar perimetralmente entre el 17 y el 21 de marzo en aquellas regiones en las que sea festivo el día 19, más conocido como el Día del Padre. De esta manera, Sanidad estima oportuno no solo cerrar la Semana Santa, desde el 26 de marzo al 9 de abril, sino también la semana anterior, durante el puente de San José.
Así se recoge en el borrador que el Ministerio de Sanidad va a presentar este miércoles a las autonomías en la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), en el cual se excluye a Canarias y Baleares, donde la entrada a estos territorios se limitará a los supuestos establecidos en el Real Decreto 926/2020 de 25 de octubre.
No obstante, esta medida tan solo afectaría a la Comunidad de Madrid y Extremadura, que son los únicos dos territorios españoles donde se permiten las entradas y las salidas, además de Canarias y Baleares.
Oposición de Madrid
Desde la semana pasada, cuando la Comisión de Salud Pública, en la que se encuentran representadas todas las comunidades y ciudades autónomas y el Ministerio de Sanidad, acordó la propuesta de medidas frente al coronavirus para Semana Santa, la Comunidad de Madrid se opuso rotundamente a los cierres perimetrales de las comunidades.
Y ahora que este miércoles se tomará una decisión definitiva, la presidenta de la región madrileña, Isabel Díaz Ayuso, sigue negándose a hacerlo, insistiendo en que esta no es la fórmula y que esta medida tan solo debería concebirse como “la última opción a tomar después de haberlo intentado todo”.
“La pandemia lo que ha hecho es demostrar que hay dos maneras de gestionar. Una es el atropello sistemático de derechos y libertades fundamentales, el cierre de regiones enteras sin informes sanitarios y la clausura por decreto de miles de negocios”, ha expuesto Díaz Ayuso.
Al juicio de la presidenta madrileña también se suma el del vicepresidente de la comunidad, Ignacio Aguado, que también apuesta por permitir el desplazamiento entre autonomías y que, para que sea seguro, se pida una PCR negativa para cruzar entre las distintas regiones.
Díaz Ayuso ha valorado notablemente las actuaciones llevadas a cabo por su Gobierno. “Esto es lo que hemos hecho durante toda la pandemia: estrategia. De manera que era el virus el enemigo a derrotar y no la vida y la libertad de los ciudadanos”, ha defendido, destacando que los restaurantes, comercios y cultura ha seguido abierta, “con sus restricciones, pero abiertos”, y que “las cosas han ido bien”.
Más medidas
No obstante, aunque la presidenta de la Comunidad de Madrid se oponga al cierre perimetral, el documento elaborado por el Ministerio de Sanidad sí ha tenido en cuenta las propuestas presentadas por la capital y ha recogido una de ellas, el hacer obligatorio en todo el país la prohibición de reuniones con no convivientes en los domicilios.
Esta medida ya está vigente en la Comunidad de Madrid desde el pasado 25 de enero, como medida para atajar el “principal foco de los contagios”, los domicilios, y no las terrazas de los bares, donde podrán llegar a reunirse hasta seis personas en Semana Santa.
Asimismo, el departamento dirigido por Carolina Darias propone limitar la movilidad nocturna “como máximo” entre las 23.00 y las 06.00 horas, y las reuniones a un máximo de cuatro personas en espacios públicos cerrados y seis en abiertos, salvo que se trate de personas convivientes.
En cuanto a los eventos masivos, se aconseja no celebrar cualquier celebración que implique aglomeración o concentración de personas, señalando que los eventos en espacios cerrados deberán seguir las normativas de aforo. Del mismo modo, Sanidad aboga por realizar una campaña institucional para evitar la relajación de comportamientos, con el lema ‘No salvamos semanas, salvamos vidas’.
En conclusión, en el documento que se presentará este miércoles se aconseja a las autonomías no bajar el nivel de alerta, “aunque los indicadores actuales sean favorables”, durante las dos semanas previas al inicio de la Semana Santa, entre las que se encuentra el puente de San José.