El artista madrileño Mario Gutiérrez Cru ha recibido 12.750 del Ayuntamiento de Madrid para un proyecto artístico que se basa en sustituir banderas desgastadas colgadas en balcones por otras nuevas. Esta noticia levantaba ayer una gran polémica, pero ahora el propio artista declara que no es lo que parece, ni lo que parece haber interpretado la Administración madrileña. La página web “Bandera a Bandera” donde se recoge la iniciativa lo describe como “con una vocación clara, embellecer la deteriorada imagen de España y recuperar su esplendor tanto internacional como nacionalmente para el orgullo patrio” a través de la sustitución de banderas, el símbolo de la Patria. Ahora bien, Cru ha explicado que “es un proyecto con una parte seria y una parte de ironía” que busca “criticar un concepto de Estado que por su propia naturaleza no es más que una cáscara caduca”, según ha declarado para ElDiario.es.
El Ayuntamiento de Madrid ha destinado una subvención de 12.750 euros a un proyecto para renovar las banderas de España colgadas en los balcones de los madrileños. Esta era la noticia que surgía ayer y que levantaba bastante polémica. Ahora se conoce el nombre del artista madrileño, Mario Gutiérrez Cru, que impulsó el proyecto antes de la llegada de la pandemia al Gobierno del PP, Ciudadanos y Vox “con una parte irónica”, según describe el propio artista, para usar estas banderas como cuestionamiento de la simbología del Estado.
En esta línea, la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, criticaba que han dado dinero público “a un proyecto del que obviamente solo ha leído la palabra bandera, mientras su gobierno no cubre las necesidades sociales”. Asimismo, Cru duda que el alcalde, José Luis Martínez – Almeida, tenga ningún conocimiento del proyecto que se ha aprobado bajo su mandato pero señala que, a su vez, “no lo habría presentado con otra administración”.
El artista presentó su proyecto a la convocatoria de Ayudas a la Creación Contemporánea y a la Movilidad 2019, cuando José Luis Martínez - Almeida ya era alcalde de la capital. Entonces la comisión de valoración del Consistorio asignó 80 puntos a la idea, 40 por interés cultural, 15 por interés sociocultural, 15 viabilidad y difusión del proyecto y 10 por trayectoria, según los requisitos registrados en las bases de la participación. De esta forma, ya antes de la pandemia el artista disponía de estas ayudas y él mismo ha afirmado en entrevistas para ElDiario.es y El País que trabaja en ello desde entonces.
La ironía de la que habla Gutiérrez llega en la página web creada para dar a conocer el proyecto y que las personas puedan entregar sus banderas. El sitio con el nombre de “Bandera a Bandera” se describe como “con una vocación clara, embellecer la deteriorada imagen de España y recuperar su esplendor tanto internacional como nacionalmente para el orgullo patrio”. Continua con la idea de que “la bandera de España es el símbolo por excelencia de nuestra Patria” y su estado “lamentable” en muchos de los balcones no corresponde con la “grandeza” de España. De ahí que se sustituyan las banderas de forma gratuita, para devolver “a España su honor”.
Ahora bien, en sus declaraciones para El País el artista madrileño afirma que pretende usar exponer las banderas sin manipular, aunque aun no sabe cómo, para “incidir en el concepto de patria y en los planteamientos de las personas orgullosas de un país, sea cual sea”. En su entrevista para ElDiario.es lo describe como una “reivindicación de la idea de patria-bandera-himno y que trata de investigar por qué hay personas que se enorgullecen de ciertos iconos que están desgastados. Si hay que enorgullecerse, el símbolo debe estar en condiciones óptimas”. Todas estas ideas pasan por el cuestionamiento de la simbología y para “criticar un concepto de Estado que por su propia naturaleza no es más que una cáscara caduca”, explica para el periódico.
Mantiene, a su vez, que “es un proyecto con una parte sería y una parte de ironía” para el que necesita un total de 150 banderas que sí sustituirá por otras nuevas en unos intercambios que están quedando grabados como parte del proyecto. De esta forma, declara que no cree que Almeida “sea consciente” de que este proyecto se ha aprobado pero, a su vez, “no lo habría presentado con otra administración”. De ahí parten críticas de otros partidos, entre ellas la de la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, que critica que se ha destinado este dinero público “a un proyecto del que obviamente solo ha leído la palabra bandera, mientras su gobierno no cubre las necesidades sociales”. Este es el cuestionamiento de que, probablemente, el Ayuntamiento no captara la ironía del artista.
El madrileño aún no sabe cuándo terminará pero el plazo, según lo indicado por el boletín oficial del Consistorio (BOAM), sería antes del 31 de marzo de este año. Desde que se hizo pública esta noticia Gutiérrez ha recibido “un montón” de correos tanto de críticas como de personas dispuestas a participar e intercambiar su bandera. Además, declara que espera que su proyecto no se vincule en ningún momento a una ideología de derechas.
El artista ya ha realizado con anterioridad otros proyectos en las mismas líneas como la sustitución en 2013 de una bandera española por una bandera de color negro en su participación en el festival Art Jaén y otros como su exposición “Hundidos” en 2017 que incluía un coche de la Guardia Civil enterrado en la tierra.