Ya es oficial, este martes, después del Consejo de Ministros, el titular de Sanidad, Salvador Illa, abandonará el Ejecutivo de Pedro Sánchez para centrarse ya al 100 por 100 en la campaña electoral catalana y en intentar llevar al PSC a la presidencia de la Generalitat de Catalunya. Este sábado, el propio Illa ya adelantó durante la celebración del Comité Federal de su partido en Barcelona que, en breve, se volcaría al 101% para ganar los comicios catalanes que siguen fijados para el 14 de febrero.
Este martes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acometerá su primera ‘crisis de gobierno’ tras un año en La Moncloa. Y lo hace para liberar al ministro de Sanidad, Salvador Illa, que será el candidato del Partido Socialista de Cataluña, en las inminentes elecciones autonómicas, que, de momento, siguen fijadas para el 14 de febrero, tras la suspensión en los Tribunales del aplazamiento que pretendía el actual Govern.
La Moncloa ha informado este mismo lunes que el titular de la cartera de Sanidad, que ha gestionado la peor crisis sanitaria de los últimos 100 años, participará en su último Consejo de Ministros y que posteriormente se dará a conocer al nuevo ministro o ministra. Son numerosas las fuentes que apuntan a que la sustituta en el cargo será la actual ministra de Política Territorial, la canaria Carolina Darías. Y que entrará en el Gobierno el primer secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta para encargarse de la cartera de deja la propia Darias. Por tanto, serán, presumiblemente, cambios menores, que no afectan de ningún modo a la gestión de esta tercera ola de la pandemia y del plan de vacunación que lleva casi un mes en marcha.
La pasada semana, el propio Iceta reconoció que Illa dejaría el Gobierno esta semana ante la inminente campaña electoral, independientemente de la fecha final de las elecciones que se deberá resolver en los tribunales. Hay que recordar que la fecha oficial es la del 14 de febrero por lo que la próxima semana debería empezar la campaña. Pero el Govern de la Generalitat aprobó un decreto de suspensión de los comicios por la situación sanitaria y quiso postponer la fecha hasta el 30 de mayo. Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha establecido cautelarmente la suspensión de ese decreto y dará su veredicto final sobre el 8 de febrero.
Y este mismo sábado, el ministro Illa dijo que “en pocos días” se volcaría a la tarea de ganar las elecciones al “101%”. “Seré el candidato de la gente que nunca se ha acercado a la agrupación (socialista), de gente que hace tiempo que dejó de votarnos, de gente que incluso nunca nos ha votado. Voy a ser el candidato de toda la gente que quiere pasar página”, dijo el dirigente socialista ante los máximos mandatarios de su partido en el Comité Federal (máximo órgano entre congresos) que se celebró de manera telemática desde Barcelona.
ILLA PRESENTA SUS CREDENCIALES PARA GANAR
Este sábado fue también el pistoletazo de salida para el ministro Illa en esta importantísima cita con las urnas tras una década marcada por la secesión, la unilateralidad, el referéndum ilegal, la judicialización de la política… y un reguero de gobiernos que se han desvivido por la confrontación con el Estado y han tratado de hacer ver a una parte de los catalanes que la independencia era posible. En definitiva, una década de confrontación política y social que ha orillado temas más importantes como se ha puesto de manifiesto durante esta crisis sanitaria.
Salvador Illa, quiere acabar con esa etapa “negra” para que la comunidad autónoma afronte los retos pendientes. En su discurso en el Comité Federal, el aún ministro aseguró que “queremos a toda Cataluña de vuelta, a todos y todas arrimando el hombro y estamos dispuestos a servirla con humildad y trabajo”.
También señaló la Cataluña que quiere “una Cataluña sin revanchas, que se centra de verdad en lo que importa: trabajo digno, sanidad pública y avances sociales”.
Arropado por todos los compañeros y compañeras de partido, el secretario de organización en la formación catalana dijo que “la unión nos hará fuertes y una Cataluña unida es imparable”. “Debemos volver a reencontrarnos con nosotros mismos. Levantar entre todos un enorme nosotros tan grande como Cataluña: volver a querernos, a escucharnos”. Una tarea en la que “los socialistas tenemos un papel esencial” porque deberán “convertir” el “hastío, el hartazgo” que ha representado la última década en “acción y energía”, afirmó.