Organizada por Naciones Unidas (ONU), Reino Unido, Francia, Chile e Italia tuvo lugar durante el pasado sábado la Cumbre de Ambición Climática para renovar los compromisos acordados en el Acuerdo de París en su 5º aniversario y elevar el nivel de ambición antes de la COP26 de Glasgow de noviembre 2021. El presidente Sánchez participó para mostrar al resto de líderes las bases del cambio español y acelerar la transición ecológica hasta el 2050, garantizando que “nadie se quedará atrás, sobre todo en aquellos territorios en los que restan oportunidades como consecuencia de esta transición energética”.
"Esta estrategia es una apuesta colectiva por un mundo diferente en el que nuestras casas, nuestros edificios públicos, nuestros coches y nuestros medios de transporte, las oficinas y las fábricas estarán diseñados para contribuir al objetivo último de la neutralidad climática, al objetivo último, en definitiva, de salvar nuestro planeta”. Así quiso incidir Sánchez en la necesaria cooperación junto con los 71 países que también están desarrollando planes de actuación para alcanzar la neutralidad climática en 2050 durante el encuentro de Ambición Climática convocado el pasado sábado.
Mostrando su total compromiso hacía una “economía verde” de alto valor añadido y que está a la orden del día, Sánchez expuso la Estrategia a Largo Plazo del Gobierno de España que permitirá a España ser uno de los principales emprendedores en mejorar las condiciones climáticas, una medida aprobada el 3 de noviembre de 2020. Unido al resto de comparecencias por parte del resto de líderes, gran parte de la reunión se ha referido a la búsqueda de nuevos planes para reanudar el Acuerdo de París en su 5º aniversario y elevar el nivel de ambición antes de la COP26 de Glasgow de noviembre 2021.
El Proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático y a la Declaración ante la Emergencia Climática y Ambiental son las tres propuestas del gobierno de España. Esta última equivale a la iniciativa del Consejo Europeo anunciada el pasado viernes de ampliar la reducción de emisiones del 40% al 55% para 2030, para alcanzar la neutralidad climática en 2050. En octubre de este año, España ya se comprometió, junto a 10 Estados Miembros, a alcanzar este objetivo.
“Todo plan y todo país suma”. Dejando ver en la intervención por parte del Ejecutivo que España es un país ambicioso en la lucha contra el cambio climático, planteó dos de sus pilares fundamentales: cambiar las fuentes de la energía que consumimos- el 97% será renovable- y el consumo menor de un 50% gracias a la eficiencia y al ahorro energético. Esta será la política que adoptará nuestro país para combatir "esta emergencia climática, el mayor desafío de nuestra civilización".