Los estadounidenses eligen durante este martes 3 de noviembre quién será el inquilino de la Casa Blanca para los próximos cuatro años en una de las jornadas electorales más largas del mundo. Los colegios de la costa Este ya han abierto, pero aún quedan muchas horas por delante hasta que los últimos centros de votación de la costa Oeste cierren la maratoniana jornada. Las encuestas dan una clara ventaja al candidato demócrata, Joe Biden, sobre el actual presidente, el republicano Donald Trump, pero nadie da nada por seguro después de los vivido en 2016 cuando Hillary Clinton se quedó a las puertas de la presidencia. Alrededor de 80 millones de ciudadanos ya han ejercido su derecho al voto mediante por correo o por adelantado lo que prevé que la participación sea histórica, aunque es posible que esto retrase el resultado final. La mayor potencia económica del mundo decido hoy su futuro y, con ello, las relaciones con el resto de los países.
Los americanos deciden hoy con su voto si quieren darle la presidencia al candidato demócrata Joe Biden o si le dan una nueva oportunidad al republicano Donald Trump. Las encuestas apuntan a una clara victoria del primero, pero después de lo que pasó en 2016 nadie da nada por seguro. Hace cuatro años, Hillary Clintón cosechó tres millones más de votos que su contrincante, pero Trump se impuso en el denominado colegio electoral lo que le dio la presidencia. Hay que recordar que el sistema electoral estadounidense es indirecto por lo que los ciudadanos no eligen al presidente de forma directa. Cada uno de los estados federados tienen una serie de miembros del ‘Colegio Electoral’ y el que gane en cada Estado, aunque sea por solo un puñado de votos, se lleva todo el botín. Así, por ejemplo, en el Estado de Florida se ponen en juego 29 votos del colegio electoral y quien consiga más votos se los lleva todos, no hay nada para el perdedor. Es presidente el que suma 270 delegados para el Colegio Electoral. Eso hace posible que se tenga más voto popular y menos peso final.
En 2016, Trump llegaba con dos puntos de desventaja sobre Hillary Clinton, pero su triunfo en varios de los denominados “Estados bisagra” que se decantan en algunas ocasiones por los republicanos y en otras por los demócratas, le permitió llevarse el triunfo final.
Sin embargo, en esta ocasión la sorpresa es mucho menos posible ya que las encuestas sitúan al actual presidente más de siete puntos por debajo de Joe Biden. Tras cuatro años de mandato, el actual presidente ha perdido apoyo en las zonas rurales, clave para su triunfo y también entre los votantes blancos sin estudios. Por el contrario, Biden agrupa el voto de las mujeres, de los hombres blancos con estudios superiores, de los latinos y de los afroamericanos. Aún así, nadie da por segura su victoria ya que debe retener la victoria en Estados clave.
La media de los sondeos realizados en los últimos días señala que el exvicepresidente de Obama cuenta con una ventaja de 7,2 puntos sobre el republicano. Pero todo el mundo está pendiente de Florida, Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Carolina del Norte y Arizona. De todos estos, Trump debería conquistar la mayor parte para poder presentar batalla. Y en todas las encuestas están muy reñidas. Por eso hace que los expertos den a Biden la victoria en 89 de cada 100 simulaciones.
Por Juan Antonio Sacaluga
RÉCORD DE VOTO ANTICIPADO
Una de las claves de la jornada está en el voto anticipado. En Estados Unidos, los votantes pueden ejercer su derecho al voto de forma anticipada y también lo pueden hacer por correo. Pero en cada Estado tienen su propia normativa. Eso hace que haya territorios donde sea más fácil votar que en otros. Las cifras muestran que 94 millones de estadounidenses ya hayan votado. Hay que tener en cuenta que en plena pandemia del coronavirus nadie quiere estar en lugares con grandes cantidades de personas y han optado por el voto a distancia. Pero también se espera que la participación se dispare en un país que está acostumbrado a unos índices bajos de voto, alrededor del 50%, algo impensable en Europa.
El presidente Donald Trump, lleva semanas atacando el sistema de voto por correo hasta tal punto que no adelante que reconozca el resultado electoral si no le es favorable como se espera. Esto puede llevar al país a protestas que pueden generar incluso violencia en las calles.
Además, el recuento de este voto adelantado es diferente en cada Estado lo que puede hacer que el resultado definitivo no se conozca hasta dentro de días o semanas. Por eso los analistas apuestan por que haya un resultado contundente a favor de Biden. Sin embargo, las encuestas apuntan a otra cosa.
Por tanto, nos esperan unas horas decisivas en la mayor economía del planeta y las consecuencias de la elección son muy grandes. La Unión Europea espera un triunfo de Biden que descongele las relaciones con Estados Unidos. Los electores americanos tienen en su mano optar por un presidente más tradicional, como es Biden, o si continúan eligiendo al populista Trump que ha cambiado las relaciones de su país con el resto del mundo.