El Papa Francisco ha mostrado su cara más humana en el documental biográfico estrenado este miércoles en el Festival de Cine de Roma, donde expresa su apoyo a las uniones civiles entre personas del mismo sexo, espetando que “son hijos de Dios y tienen derecho a una familia”. A diferencia de sus predecesores, el pontífice ha marcado un nuevo rumbo para la Iglesia en su reconocimiento de la comunidad LGTBI.
El Vaticano presenció este miércoles una sorpresa mediática. El Papa Francisco, líder de la Iglesia Católica Romana, se declara “favorable” a las uniones gais civiles. Estas palabras han supuesto toda una revolución en la postura de la Iglesia católica con respecto al colectivo LGTBI, ya que es la primera vez que un Papa realiza una declaración en favor de los derechos de los homosexuales.
El documental de su vida bajo el nombre de ‘Francesco’, estrenado este miércoles en el Festival de Cine de Roma y realizado por el cineasta ruso Evgeny Afineevsky, recoge, entre otros aspectos, las opiniones del pontífice acerca de la comunidad LGTBI donde expresa que las personas homosexuales “son hijos de Dios y tienen derecho a una familia”.
En la película comenta que este colectivo “no puede ser apartado o ser tratado como miserables” y defiende la creación de una ley de uniones civiles para que sean “protegidos legalmente”. Jorge Mario Bergoglio declara que él mismo se esforzó en ello cuando era arzobispo de Buenos Aires, ya que durante esos años se oponía a la legislación para aprobar matrimonios entre personas del mismo sexo, pero apoyó algún tipo de protección legal para los derechos de las parejas gais.
Por ello, no es la primera vez que se muestra favorable a la inclusión de la comunidad LGBTI. Siempre ha dicho que hay que integrarles, acogerles y acompañarles. En unas declaraciones a periodistas, regresando de Río de Janeiro en 2013 ya comentó: “Si una persona es homosexual y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla?”. Sin embargo, sí que es la primera vez que como Papa habla públicamente y de manera tan clara y tolerante a favor de las uniones civiles.
En el documental habla de Andrea Rubera, un hombre gay que junto a su pareja adoptó a sus tres hijos. Rubera le escribió una carta al Papa para contarle que quería criar a sus hijos como católicos, pero tenía miedo de que pudiesen ser discriminados. Días después, el pontífice le telefoneó para decirle que su carta era muy “bella” e instando a la pareja a introducir a sus hijos en la comunidad religiosa, pero advirtiéndole que estuviera preparado para cierta oposición. “Su mensaje y su consejo fue muy útil porque hicimos exactamente lo que nos dijo. Es el tercer año que los niños siguen el camino espiritual en la iglesia”, ha confesado Rubera en el documental.
Afineevsky ha declarado que no pretende mostrar a Francisco como una celebridad: “A diferencia de la película de Win Wenders de hace un par de años, es importante para mí no mostrarlo ni como un Papa ni como el rey del universo, sino como una persona humilde: hago esto, intento ayudaros, mostraros los desastres que vosotros, como humanidad estáis haciendo, intentemos dejar de cometer errores, cuidar el medio ambiente, ser hermanos, terminar con el odio”.
Todo tipo de opiniones
En las redes sociales, periodistas, políticos, activistas y diversos actores reaccionaron ante la noticia. El padre James Martin, el sacerdote jesuita que más se ha esforzado por tender puentes hacia los gais en la Iglesia, quiso elogiar las declaraciones del pontífice como “un gran paso adelante en el apoyo de la Iglesia a la comunidad LGBTI”.
“El apoyo del Papa Francisco a las uniones civiles entre personas del mismo sexo es un gran paso adelante en el apoyo de la Iglesia a las personas LGBTQ. Está en consonancia con su enfoque pastoral para las personas LGBT, incluidos los católicos LGBT, y envía una fuerte señal a los países donde la Iglesia se ha opuesto a tales leyes”, ha establecido en un comunicado.
Siguiendo esta misma línea, a favor del reconocimiento de las uniones civiles, entre otros, están los cardenales Walter Kasper y Gualtiero Bassetti, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, y el obispo Marcello Semeraro, muy cercano a Francisco, nombrado hace poco jefe de la Congregación de los Santos.
Sin embargo, también encontró oposición en sus declaraciones. Sus críticos conservadores dentro de la jerarquía eclesiástica, y en especial en el ala conservadora de la Iglesia en Estados Unidos, vieron los comentarios como una contradicción con las enseñanzas de la Iglesia, acusándole de diluir la doctrina de la Iglesia.
“La declaración del Papa contradice claramente lo que ha sido la antigua enseñanza de la Iglesia sobre las uniones entre personas del mismo sexo”, ha expresado el obispo Thomas Tobin de Providence, Rhode Island, que considera que dichos comentarios deben ser aclarados.
Lo que es evidente es que el Papa Francisco tiene una tendencia a hacer comentarios públicos que enloquecen tanto a sus partidarios como a sus críticos. Las declaraciones recogidas en el documental sobre temas que algún día fueron considerados prohibidos en la Iglesia, generarán también discusión en todo el mundo.
Racismo y guerras
El documental filmado por Evgeny Afineevsky, que fue rodado mientras en Europa se imponía el confinamiento por la pandemia de coronavirus, no solo está dedicado a tratar este tema.
A su vez, se habla del coronavirus, del racismo, de las guerras en Siria y Ucrania, de la persecución de los rohingya en Myanmar y de otras situaciones actuales, que, según el Papa, “pueden ayudar a construir un puente hacia un futuro mejor y al mismo tiempo crecer como comunidad global”.