El Gobierno planea entrar en una nueva fase en la lucha contra la Covid-19. La portavoz del comité técnico, Maria José Sierra, ha explicado en su rueda de prensa de hoy que la prioridad ahora es “hacer esos análisis a las personas que presentan síntomas”. El ejecutivo quiere aumentar el número de tests realizados entre la población para así poder diagnosticar el mayor número de casos posibles. Aquellos que sean asintomáticos o presenten patologías leves, serían aislados en recintos habilitados con tal fin. Es una medida que en China dio buenos resultados a la hora de crear un cerco a la enfermedad.

El Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha solicitado en su reunión con los presidentes autonómicos que estos elaboren una lista con los espacios que puedan ser utilizados. Los planes de Moncloa pasan por habilitar hoteles, albergues, palacios de congresos y polideportivos. La lista deberá estar confeccionada para antes del 10 de abril, pero la fecha en la que empezaría el aislamiento no ha sido desvelada.

Los expertos apuntan que la expansión descontrolada de los primeros días se ha conseguido frenar, como así demuestra la estabilización de las cifras de contagios e ingresos hospitalarios de los últimos días. Así que, para llevar a buen puerto las medidas de detección masiva, Sánchez ha anunciado a los líderes autonómicos que repartirá hasta un millón de tests a lo largo de todo el territorio.

Sierra, en su comparecencia de hoy, ha incidido en que es una medida que facilitará pasar “del distanciamiento social a esta otra fase” y ha querido recalcar que “Para garantizar que los casos están aislados, una medida es en el domicilio, pero hay otro tipo de opciones, como estas instalaciones”.