El PP ha acusado al PSOE, de modo miserable, de querer regular la eutanasia para ‘ahorrar’ en pensiones y en gastos sanitarios o de dependencia. ¡Sin comentarios!
VOX va más allá y dice que la eutanasia hace del Estado una máquina de matar y acusa al Gobierno de querer convertir el sistema "en totalitario" y de iniciar una "pendiente resbaladiza del suicidio asistido" como "respuesta al sistema de pensiones. Por su parte, los Obispos insisten en que “no existe una demanda social y que la eutanasia no se plantea como una cuestión médica, sino ideológica".
En el PSOE consideramos que desde hace años se dan en España las condiciones (demanda de la sociedad con un apoyo de más del 70%, amplia mayoría política y respaldo constitucional y jurídico) para legislar sobre el derecho a la eutanasia.
La verdad es que la eutanasia será un derecho regulado con rigor por la ley para casos muy concretos y sometido a garantías éticas, jurídicas y médicas que aseguren que la decisión de la persona que solicita la eutanasia sea autónoma, libre de presiones, informada, consciente y mantenida en el tiempo.
Seguirá un procedimiento detallado para la prestación de la ayuda para una muerte digna, bajo la supervisión de una Comisión de Control y Evaluación que se constituirá en cada Comunidad Autónoma. Será quien apruebe y evalúe todo el proceso, de forma previa y a posterior a la muerte.
En el PSOE consideramos que desde hace años se dan en España las condiciones (demanda de la sociedad con un apoyo de más del 70%, amplia mayoría política y respaldo constitucional y jurídico) para legislar sobre el derecho a la eutanasia. Por eso, el Grupo Parlamentario Socialista presentó la Proposición de Ley Orgánica de Regulación de la Eutanasia, que comienza su debate y tramitación en el Congreso tras su toma en consideración el pasado 11 de febrero por el Pleno. Ahora, vamos a informar de su contenido, participar en el debate social escuchando a los sectores interesados e implicados y argumentando de modo pedagógico.
Debemos diferenciar entre la eutanasia y los cuidados paliativos. Importantes ambos derechos para garantizar una muerte digna en supuestos diferentes. De ahí que también volveremos a presentar otra Ley de Muerte Digna - ya lo hicimos en 2015 y 2017 cuando fueron rechazadas por el PP - que regula los derechos y garantías de todas las personas en situación de muerte inminente mediante una asistencia en el final de sus vidas, respetando su autonomía y voluntad para morir en condiciones dignas, con cuidados paliativos integrales, acompañamiento, intimidad, etc.
La Ley de Muerta Digna, es otra ley diferente, que regula los derechos y garantías de todas las personas en situación de muerte inminente mediante una asistencia en el final de sus vidas.
Estas dos leyes constituyen la materialización de un compromiso del PSOE en favor del avance social y de la ampliación de los derechos civiles. Y guardan coherencia con derechos fundamentales reconocidos en la Constitución.
En el caso de la Ley de la Eutanasia, se recoge el derecho individual de las personas que, sin estar en un proceso abocado a una muerte inminente, sufren una enfermedad grave, crónica e invalidante o grave e incurable. Situaciones que produzcan un sufrimiento físico o psíquico constante e insoportable. En estos supuestos, deciden solicitar la prestación de ayuda de la sanidad pública para morir anticipadamente con dignidad. También da seguridad jurídica a los profesionales que participan y les reconoce la objeción de conciencia.
Defendemos que la eutanasia es un derecho de la persona, no una obligación, para poner fin al sufrimiento insoportable con libertad y autonomía, preservar su integridad y su dignidad,
La regulación de la eutanasia debe hacerse a través de Ley Orgánica porque implica modificar el Código Penal para despenalizar la eutanasia. Supone incorporar un nuevo derecho subjetivo de ciudadanía para las personas que residan en España, con mayoría de edad y capacidad de obrar, etc.
Esa decisión no podrá ser debida a circunstancias que tuvieran más que ver con una falta de condiciones dignas, médicas, sociales, o familiares para afrontar la situación. Voluntad que ha de ser fruto de un adecuado proceso de información y deliberación con su médico personal, con dos solicitudes firmadas en un plazo de tiempo y validado por otros profesionales.
Defendemos que la eutanasia es un derecho de la persona, no una obligación, para poner fin al sufrimiento insoportable con libertad y autonomía, preservar su integridad y su dignidad y no obligarle a vivir en condiciones insufribles por inhumanas. Defendemos la vida, pero no la obligación de vivir cuando erosiona gravemente la integridad física o moral.
*Odón Elorza / Diputado del PSOE por Gipuzkoa y Portavoz en la Comisión Constitucional.