Todo esto viene desde 1989, cuando la Diputación provincial de León empezó a encargarse de un vivero situado en una finca en Ribaseca. Esta parcela contaba con una extensión de 5,5 hectáreas, en las que se producían árboles y plantas ornamentales. Además, dentro de ese espacio, 1.500 metros cuadrados de superficie son dedicados para las plantas de invernadero y umbráculo, donde se obtienen más de 10.000 plantas herbáceas y arbustivas al año. Estos vegetales son producidos con el fin de ajardinar, embellecer y crear más espacios verdes en las zonas rurales del territorio leonés.

Esta última semana, un total de 56 ayuntamientos y 68 juntas vecinales han recibido 1.664 árboles a raíz desnuda, 1.310 plantas para cerramiento y bordura y 1.025 plantas autóctonas. Todos estos árboles y plantas están valorados en más de 56.400 euros. Por supuesto, las plantas han sido producidos en este vivero de León. Esto es debido a que cada año, en esta finca se cultivan más de 8.000 árboles a raíz desnuda que se distribuyen por los ayuntamientos los solicitan, durante la campaña de invierno.

Las plantas más cultivadas son las frondosas y las coníferas. Entre las primeras mencionadas, podemos destacar los abedules, albizzias, arces, castaños de indias, catalpas, fresnos y tilos, y, entre las segundas, los cedros, cupressus, chamaecyparis y piceas.

Los trabajadores del Vivero Provincial no trabajan solos, ya que tienen la ayuda de los alumnos del Programa Mixto de Formación y Empleo Monte San Isidro.