Días después de las Elecciones Europeas, Autonómicas y Municipales, los Comités Ejecutivos de los partidos se han reunido para anlizar resultados y posibles pactos. Tras un tenso encuentro de los populares en su sede de Génova en Madrid con clara advertencia a Pablo Casado sobre la derechización del PP, al que responsabilizan de haber provocado la pérdida de tres millones de votantes y el hundimiento del PP a nivel nacional, ahora es Vox quien tras reunirse, advierte a sus socios del bloque de la derecha, PP y CS, que "sólo les darán sus votos a cambio de entrar en los gobiernos municipales y regionales pertinentes". Con ello, Vox pone en evidencia a Ciudadanos que tendrá que explicar a sus socios liberales europeos si se convierte en la puerta de entrada de la ultraderecha en las instituciones.
El partido español de extrema derecha, Vox, liderado por Santiago Abascal ha advertido a sus socios de la derecha, Partido Popular y Ciudadanos, de que esta vez sus votos no serán ofrecidos a cambio de nada como hicieron en Andalucía tras las elecciones autonómicas del 2 de diciembre. El Comité Ejecutivo Nacional de Vox ha establecido que se exigirá la “entrada” de Vox en algunos gobiernos autonómicos, tales como los de la Comunidad de Madrid y la Región de Murcia, así como en el ayuntamiento más deseado de toda España, el de Madrid.
Esta es “solo una de las condiciones” que ha acordado la formación ultraderechista para apoyar a otros partidos, aunque mantienen su línea roja sobre las propias negociaciones, ya que cualquiera que precise del voto de sus concejales, “deberá sentarse a hablar con el comité negociador”, obligando así a Cs y a su líder Rivera a fotografiarse con los dirigentes de Vox, como socios de Gobierno y no seguir disimulando como si sólo fuera el PP el que negocia y Ciudadanos quien esconde la mano.
Este será “un mandato de obligado cumplimiento” para todos sus cargos públicos, algo que empujará a la formación de Albert Rivera a establecer contactos directos, hasta ahora inexistentes, con miembros del partido de Abascal. Y no solo eso, ya que Vox considera “razonable” entrar a formar parte de aquellos gobiernos en los que tengan “una representación significativa”, como es el caso de los ya citados (Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de la capital o la Región de Murcia). Además, hay que destacar que hay una veintena de ciudades en las que pueden ser clave para la formación de gobiernos: Santander, Huesca, Burgos, Palencia, Zaragoza, Guadalajara, Granada, Teruel, Ciudad Real, Cáceres, Badajoz, Alicante, Jaén, Córdoba y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
El portavoz en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, formará parte del comité negociador de la formación, que estará formado por Macarena Olona, Pedro Fernández, Enrique Cabanas y Víctor González.
Ciudadanos responde
Por su parte, el secretario general de Cs, José Manuel Villegas, ha insistido en que su socio preferente es el Partido Popular, rechazando así las exigencias de Vox, con los que, advierte, no formarán gobierno. Además, ha asegurado que solo se sentará con el partido de Abascal para “informarle de los acuerdos” a los que lleguen con los populares. De este modo, los de Rivera pretenden que el pacto, al estilo Moreno Bonilla en Andalucía, se repita en diferentes circunscripciones españolas. La diferencia es que Vox, ahora va a exigir concejales y consejeros, con lo que ahora el dirigente de Ciudadanos tendrá que dar muchas explicaciones a sus socios europeos. El primero hablar claro y rebelarse a estos pactos, es Manuel Valls, que ya ha dicho que no se sentará en un gobierno ni con la extrema derecha ni con los independentistas catalanes, y que Cs debería olvadar ese estúpido "cinturón sanitario al Psoe y replantearse sus posiciones estratégicas".
"Nuestra idea, en líneas generales, es que nuestro socio preferente sea el PP, que no haya tripartitos; puede haber miembros de Gobierno propuestos por el PP y Ciudadanos, (...) pero nuestro socio preferente debería de ser, en la mayoría de sitios, el Partido Popular", anunciaba tajante el dirigente de la formación naranja. "Como pasó en Andalucía", informarán "a los partidos" de los acuerdos a los que lleguen con el PP y eso se producirá "enviándoles los acuerdos por email" o sentándose "a explicárselo" llegado el caso, insiste una y otra vez Villegas mientras cada vez hay más presión interna para que Ciudadanos apoye a la fuerza más votada ponga el veto en Vox, como hacen los liberales europeos.
"Lo importante para mí no es la foto, sino con quién se negocia, los contenidos de Gobierno y las composiciones de Gobierno, y ahí no contemplamos negociaciones a tres bandas", ha concluido.