La Justicia venezolana a punto de crear una crisis diplomática al pedir al Gobierno español la entrega del opositor Leopoldo López que se encuentra como "huesped" en la residencia del embajador español en Caracas, Jesús Silva. El ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell que se encuentra en Beirut, ha asegurado este viernes que España "no entregará a López pero que si, limitará su actividad política" para evitar que el opositor anti chavista convierta la casa del embajador en una tribuna. El Gobierno español pide a Venezuela que respete la inmunidad diplomatica de la embajada. Entre tanto Europa considera que se trata de un asunto nacional español y no se inmiscuye.
Tras la liberación por una sección militar de Leopoldo López hace tres días y el refugio del opositor venezolano en la casa del embajador español, Jesús Silva, los disturbios callejeros en Caracas continuan en su tercer día. Por un lado, Juan Guaidó, presidente de la Asamblea y presidente provisional reconocido por más de cincuenta países, arenga a los venezolanos a que convenzan a la Fuerzas Armadas para desobedecer a Nicolás Maduro y forzar su salida del país, y por el otro, el presidente chavista Maduro, intenta tomar el control absoluto de las mismas. En esta crisis, el ministro de Asuntos Exteriores español, en funciones, Josep Borrell, ha asegurado que "España no entregará a López pero que limitará su actividad política desde la residencia del embajador".
“España no va a permitir que su embajada se convierta en un centro de activismo político”, ha dicho el ministro, Borrell que se encuentra en viaje diplomático en Beirut. Por otro lado, el propio Leopoldo ha asegurado que “se encuentra en calidad de huesped y no tiene previsto pedir el asilo político”. Algo que, por otro lado, la justicia venezolana no permite al encontrarse en territorio español. La Justicia ha solicitado a las autoridades españolas la entrega del opositor venezolano, pero la diplomacia española se niega a aceptar esta petición dado que dicho espacio de la embajada constituye zona de inmunidad diplomática.
El embajador español, Jesús Silva y el ministro de Exteriores venezolano Jorge Arreaza, han mantenido conversaciones en las que el diplomático español ha dejado clara la posición de España. “Leopoldo López no solo no será entregado sino que es considerado como un invitado en la Embajada española, aunque ha insistido en que no van a dejar que convierta este lugar en centro de actividad política”. El Gobierno español ha pedido a Venezuela que respete la inmunidad diplomática del territorio de la embajada española. Si bien López se encuentra bajo una orden de búsqueda y captura por parte de la Justicia venezolana que considera que el opositor "violó su arresto domiciliario" al huir el pasado martes junto a su esposa y su hija. En un primer momento se refugiaron en la embajada de Chile y luego se dirigieron a la de España donde el opositor se siente más seguro.
En referencia a una posible intervención militar venezolana, López ha asegurado que “no descarta ningún escenario que esté dentro de la Constitución, entre ellos que Maduro pueda ordenar una intervención militar” algo que para el opositor anti chavista originaría un "derramamiento de sangre". En la misma línea, el ministro español, Josep Borrel, en nombre del Gobierno español, ha pedido encarecidamente que se evite la violencia y que cualquier salida a este conflicto pase por la pacificación entre las partes.
Por su parte La Unión Europea (UE) considera que la decisión de España de acoger a Leopoldo López y su familia “es una decisión nacional”. “Esta es la decisión nacional de España, pero puedo subrayar la importancia del respeto a la inmunidad diplomática en todos los casos", dijo este viernes la portavoz de Asuntos Exteriores de la Comisión Europea, Maja Kocijancic, preguntada sobre si la UE apoya que España esté dando protección a López.
José Luis Ábalos, secretario de Organización del Psoe y ministro de Fomento, en funciones, también ha hablado al respecto al ser preguntado, este viernes en los desayunos de RTVE sobre la internacionalización del conflicto a tenor de las declaraciones del gobierno norteamericano. Ha dicho que “el Gobierno español no prevé que haya una intervención de Estados Unidos en Venezuela”. Para el ministro en funciones, la posición de España pasa en todo momento por "una vía pacífica que permita en Venezuela convocar elecciones libres". Ábalos ha insistido en que la intención del Gobierno español es que el dirigente opositor Leopoldo López siga en la embajada de España en Venezuela, "se mantenga la seguridad de las instalaciones y no se produzca ninguna intervención sobre la misma".