El Tribunal Supremo ratificó en enero que Víctor González Coello de Portugal cometió irregularidades contables en los balances de la empresa Marmolería Leonesa entre los años 2009 y 2012
El número tres de Vox, Víctor González Coello, debe cumplir una condena de tres años de inhabilitación para administrar bienes ajenos y a “representar o administrar a cualquier persona”, según ratificó el pasado mes de enero el Tribunal Supremo.
El vicepresidente de la formación ultraderechista fue condenado por la Audiencia Provincial de León en enero de 2015 por irregularidades contables durante su gestión al frente de la empresa Marmolería Leonesa entre los años 2009 y 2012. González realizó y no contabilizó una operación crediticia con otra de las sociedades de su propiedad, Petrabor Producción S.L. lo que provocó una disminución patrimonial de la primera de alrededor de un millón y medio de euros.
Según la primera sentencia, se comprobó que “se han cometido irregularidades contables relevantes para la comprensión de la situación real, financiera y patrimonial de la empresa concursada”. Ahora el Supremo ha avalado esa primera resolución judicial que también indicaba que se “incumplió sustancialmente la obligación de una correcta y adecuada contabilidad”.
Víctor González compró Marmolería Leonesa en 2007 y bajo su administración la empresa dedicada a la comercialización del mármol cerró dejando en la calle a sus 60 trabajadores. El dirigente de Vox figuró como administrador único hasta el 2014 cuando la empresa solicitó un concurso voluntario de acreedores y finalmente cerró. Este cierre se adujo en la caída de los pedidos por la crisis que se unió a una deuda que alcanzó la cifra de 3,8 millones de euros.
El ahora dirigente político esgrimió en su defensa que “existían expectativas de negocio con otras empresas que justificaba que no se reflejase cierto deterioro en las participaciones de Petrbor, así como el convenio de acreedores para refinanciar la deuda”, sin embargo, el tribunal del declaró culpable por el concurso en Marmolería Leonesa.
Tras hacerse con la empresa en 2007, González presentó en 2010 un ERE (expediente de regulación de empleo). Sus trabajadores fueron despedidos y cobraron sus salarios y las indemnizaciones correspondientes a través del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa).
Sorprende la nefasta gestión, sobre todo para los trabajadores, de la empresa llevada a cabo por el vicepresidente de Vox, a tenor del amplio curriculum que atesora Víctor González. Nacido en 1975, González ha vivido en Francia, Reino Unido y Sudáfrica. Cuenta con amplios estudios financieros y tiene la doble titulación ADE por las universidades públicas de Madrid y Bachelor of Arts con Honores en European Business por la BABS de la Universidad de Portsmouth. Además, presume de ostentar un máster en Finanzas de la CUNEF y un Executive MBA del IESE.
Este empresario metido ahora a político, nació en 1975 en Madrid. Está casado y tiene siete hijos. Define a Vox como “la respuesta a mis hijos de un futuro esperanzador en una España mejor”.
No se esconde a la hora de calificarse como ferviente católico y convencido próvida y defiende “sin lugar a dudas la tradición cristiana de Europa, porque creemos que hay civilizaciones buenas y civilizaciones malas”. Igualmente, añade que “Europa, el mundo occidental, y el estado de bienestar parten del pensamiento cristiano, de algo bueno, que es darse a los demás. Y es que no es lo mismo la figura de Jesús, que muere por todos nosotros, que la de Mahoma, que se dedicó a asesinar y a violar a niñas”.