Se celebró en Liceo de Barcelona y los nombres más importantes de la comunicación española fueron los protagonistas. Fue presentado por un fantástico Juan Carlos Ortega que a través del humor hizo de maestro de ceremonias. La gala no pudo empezar mejor y es que, la entrada de Juan Carlos fue épica, llegando al escenario sobre un caballo blanco con alas.

Como es costumbre en los últimos tiempos, la libertad de expresión en la comunicación española está recibiendo duros palos. A favor de ella se manifestaron la mayoría de premiados en el acto. Para empezar, Juan Carlos abrió con un alegato a la libertad y criticando todo aquello que afecta al periodismo.

El premiado a mejor presentador del año fue Jordi Basté, por su labor en El Mon. Alegó que la radio “Siempre ha sido el hermano pequeño, antes de la televisión y ahora de internet, pero siempre flotamos”. Julia Otero, por El Gabinete; Isaías Fuentes, en La Unidad de Vigilancia; o David Broncano con La Vida Moderna en Cadena Ser fueron otros de los premiados en el ámbito de radio.

En cuanto a televisión, la primera en pasar por la alfombra roja fue Sandra Sabatés. Su trabajo en El Intermedio le ha hecho ser nombrada mejor presentadora por “poner de manifiesto una mirada propia, una calidad profesional y una empatía con los espectadores al servicio de un programa que tiene un punto de vista crítico con la actualidad”. Ella también se ha unido a las criticas en contra de los recortes que está recibiendo la libertad de expresión en los últimos tiempos. Asegurando que la libertad en la comunicación está pasando por unos momentos difíciles y toca defenderla.

No podía faltar a la gala Operación Triunfo, galardonado como mejor programa de entretenimiento. Fariña fue nombrada mejor serie española y Paquita Salas (Netflix) mejor serie de emisión digital.

En música, destaca el homenaje a Manolo García, Premio Nacional de música a la trayectoria o de nuevo OT, cómo fenómeno musical del año.