El mundo no está en el camino correcto para alcanzar el objetivo de eliminar el sida como una amenaza de salud pública en 2030. Las nuevas infecciones de VIH registraron un aumento del 29% en Europa del Este y Asia Central, del 10% en Oriente Medio y África del Norte y del 7% en América Latina. Los expertos piden repensar la respuesta a la epidemia.