Dando ejemplo de cómo no actuar, el pasado martes, la presidenta de la Comunidad de Madrid inauguró su hospital Isabel Zendal sin límite de prensa ni invitados a pesar de la situación pandémica. Se anunció la dotación hospitalaria de 240 camas, esperando alcanzar las 1.000 sin suficiente personal para cubrir ninguna de esas cifras. La dirigente popular dejó claro su inclinación de no contratar a nuevo personal, sino que procedería a una reubicación de profesionales.
“Es intolerable que ante la crisis que vivimos, el Gobierno de la Comunidad de Madrid quiera trasladar personal de los centros de salud y del Hospital de Fuenlabrada al nuevo centro hospitalario abierto esta semana, dada la situación de emergencia sanitaria que vive nuestra ciudad”, se explica en el texto de la moción.
A pesar de las promesas realizadas por el Gobierno regional tras la primera ola de dotar a Madrid con 600 nuevos profesionales, queda comprobado que las palabras se las lleva el viento. La cruda realidad corresponde a un aumento de 46 médicos de familia y en pediatría ha decrecido en 17 especialistas.
En la moción que tendrá lugar en sesión plenaria llevada a cabo por el grupo municipal socialista y Unidas Podemos, no solo se mostrará su desacuerdo en el plan de actuación de la presidenta conforme al nuevo hospital, sino que también se exigirá una mejora en cuanto a las condiciones laborales de estos profesionales que se han dejado la piel, sobre todo en estos últimos ocho meses.
Este Ayuntamiento no se quedará de brazos cruzados frente al traslado de sus médicos y un paro abismal con numerosos titulados que están esperando a ser contratados. Fuenlabrada exigirá a la Comunidad de Madrid la contratación de profesionales para reforzar los servicios de atención primaria, centros hospitalarios y rastreadores para hacer frente a la pandemia del COVID-19, además del “no al traslado”.