Joaquín Torra, presidente de la Generalitat de Catalunya, llevará a cabo una remodelación exprés de su Ejecutivo para sustituir a tres miembros de su Gabinete que se adecúe a la nueva realidad política del sector post convergente tras la escisión de PDECat y la huida de parte de sus cargos a JxCAT, la nueva formación que lidera el expresidente Carles Puigdemont.
Torra releva al conseller de Interior, Miquel Buch por el abogado Miquel Samper. Buch siempre ha estado en el punto de mira del independentismo por su gestión de los Mossos d’Esquadra y sus actuaciones en las protestas que se sucedieron tras conocerse la sentencia del procés de Cataluña.
Por su parte, la consellera de Empresa, Àngels Chacón fue la única dirigente del PDECat que mantiene el carnet y optó por quedarse en la formación creada en su día por Artur Mas en 2016. Ahora ocupa su lugar Ramón Tremosa con lo que Torra liquida de su gobierno a la última representante de la formación heredera de CDC.
Y la ya ex consellera Mariàngela Vilallonga deja su puesto a Àngels Ponsa que era hasta ahora directora general de Creació, Acció Territorial i Biblioteques.
Con este movimiento, Torra anticipa su intención de alargar la legislatura y no adelantar las elecciones. Y eso que dentro de quince días se abre el juicio en el Supremo por el que el presidente podría quedar inhabilitado por el caso de los ‘lazos amarillos’ y su desobediencia a las órdenes de la Junta Electoral Central durante los diferentes comicios del año 2019.
Se cierra también con esta remodelación una parte de la guerra abierta entre el PDECat y JxCat tras el trasvase de cargos de la formación de Artur Mas a la que ahora lidera Carles Puigdemont.
En la parte del Govern formada por ERC no hay cambios, a pesar que Torra ofreció al vicepresidente Pere Aragonés la posibilidad de retocar también la parte republicana del Ejecutivo catalán.