El PSOE mira hacia Ciudadanos, así como al resto de formaciones políticas que componen el arco parlamentario, con el fin de aprobar unos más que necesarios Presupuestos Generales del Estado (PGE) ante una situación económica excepcional provocada por la pandemia decretada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante el pasado mes de febrero como consecuencia del Covid-19.
Esto ha provocado críticas desde Unidas Podemos, quienes miran con recelo a Ciudadanos, y prefieren luchar por el apoyo de los republicanos catalanes. Sin embargo, el acuerdo presupuestario podría requerir el apoyo del centro político, ya que otras formaciones se han mostrado contrarias a refrendar las cuentas.
ERC no está por la labor
ERC ha puesto además su veto a la formación naranja, que ha mostrado un cambio de estrategia desde el comienzo de la pandemia al apoyar la sucesión de varios estados de alarma para mantener la gestión llevada a cabo por el Gobierno hasta ese momento, que tal y como ha recordado el propio Pedro Sánchez en más de una ocasión, ha salvado la vida de más de 300.000 personas, la cifra que sopesaban expertos sanitarios internacionales que podría haber afectado de manera mortal a España durante la emergencia sanitaria.
También cabe destacar que la situación de la monarquía española no ha ayudado a solventar las distancias entre ERC y el Gobierno de coalición, desde el que también surgen divergencias. La situación judicial de los presos del 'Procés' también ha hecho mella ante un posible acuerdo de las cuentas.
Por su parte, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se encuentra detallando los últimos flecos del cuadro macro con los ministerios para dar con los Presupuestos "del consenso", tal y como los ha descrito en las últimas semanas, abiertos a que cualquier formación pueda refrendarlos.