Las Comunidades Autónomas, junto al Ministerio de Educación, han decidido este jueves 14 de mayo formar un grupo de trabajo para debatir acerca de la organización escolar adaptada a la pandemia de la Covid-19 para el próximo curso, cuyos planes deben esta preparados antes de verano y deben incluir todos los escenarios de actuación posibles. Este grupo de trabajo se encargará de elaborar un plan para el regreso a las aulas en función de la evolución de la pandemia:
- Que pueda volverse a las clases presenciales sin tener que mantener la distancia entre personas.
- Que haya que seguir manteniendo esa distancia para evitar los contagios. Lo que obligará a reorganizar los espacios de los centros, a combinar las clases presenciales y a distancia o adecuar los horarios de los alumnos.
- Que la enseñanza tenga que ser a distancia porque un rebrote obligue de nuevo al confinamiento.
Los planes para la vuelta al nuevo curso tendrán que estar listos antes del verano. Sea cual sea el escenario habrá que adaptar el currículo para recuperar para de los contenidos perdidos de este año y para simplificarlos a lo mas esencial.
En relación a este curso 2019/2020 afectado por la pandemia, ha habido consenso para dar prioridad en el regreso a las aulas de forma voluntaria a los alumnos de 4º de ESO a 2º de Bachillerato a partir de la entrada a la fase 2.
Educación, también ha indicado que las CCAA pueden organizar actividades voluntarias de apoyo y de refuerzo para alumnos que lo necesiten y abrir los centros de educación infantil destinados a niños de 0 a 6 años cuyos padres tengan que acudir presencialmente a sus puestos de trabajo a partir de la fase 2. No obstante, la mayor parte de las comunidades ha rechazado esta propuesta.