Móstoles es una de las 150 ciudades españolas que tendrá que crear una zona de bajas emisiones debido a la nueva ley de Cambio Climático en la que trabaja el Gobierno. El Ayuntamiento de Móstoles lo recibe como una medida muy positiva, aunque ya cuenta con un protocolo anticontaminación en la almendra central de la ciudad, el Área 20-30, que limita la velocidad a 20km/h o 30km/h dependiendo de la zona. Además, el acceso está condicionado por los distintivos ambientales de la DGT.
El Área 20-30 también contempla restricciones en el aparcamiento y solo permite a los vecinos que cuenten con una autorización de residente que estacionen exclusivamente en su barrio. Sin embargo, los vehículos autorizados por el Ayuntamiento de Móstoles y los coches eléctricos se encuentran fuera de esta restricción. Del mismo modo, las limitaciones no afectan al transporte público, a vehículos de personas con movilidad reducida y a los destinados a actividades concretas como mudanzas, alimentación o coches oficiales.
En Móstoles el umbral de alerta de NO2 no se ha superado en ningún momento desde que se está realizando el control y vigilancia de la contaminación atmosférica.